Es cierto que son cosas que ya se imaginan y que, los que tenemos ya a partir de una cierta edad, directamente las hemos podido comprobar. Una televisión de los años 80 duraba al menos 20 años, y si fallaba, la arreglabas por 2 duros. Me gustaría ver la cara de un dependiente de una gran superficie de electrodomésticos al llegarle con un plasma para que lo arreglen. Pero es que algunas de las cosas que se ven en el documental se podrían calificar como timo, porque si no, que me digan a mí qué es programar una impresora para que falle al llegar a un determinado número de impresiones aún sin haber ningún fallo técnico de ninguna clase.
Un documental para remover conciencias.
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