martes, 25 de septiembre de 2012

Terror a las ondas EM

Llama mucho la atención ver la intranquilidad que produce a casi todo el mundo el hecho de tener cerca una antena de telefonía móvil. Una vez más, es una mezcla de desconocimiento, mitos, "dicen que...", y de "eso no puede ser bueno".


Probablemente da exactamente igual lo que yo escriba aquí y lo que hayas leído antes y lo que leas después, si eres de los que piensan que las antenas de telefonía móvil producen cáncer, lo seguirás pensando. Para aquellos a los que les gusta tener varios puntos de vista, sigan leyendo.

La potencia de transmisión de cada uno de los transmisores de una estación base suele estar como mucho alrededor de los 20W, con picos máximos de hasta 40W con una sola portadora. Como muestra estos nodos B (nodo B es como se llama a una estación base -la antena y lo que la controla- de UMTS) de Siemens, Ericsson o Nokia. ¿Mucho? ¿poco? un apunte: una estufa casera de no mucha potencia consume 1500W tranquilamente. Se puede decir que claro, una estufa no radia. ¿Seguro? ¿y cómo te llega el calor? Demos un repaso a lo que es la energía radiante por infrarrojos. No es una radiación de alta frecuencia como la de las antenas de telefonía móvil, eso es cierto, pero sí hay radiación. Por cierto, antes de meterle fuego a la estufa llamo a la calma, no son perjudiciales.

Considerando el caso peor, 40W, que en absoluto se mantienen en el tiempo, habría que ver si son o no perjudiciales y sobre todo, cuántos de esos 40W pueden llegarnos. Para ello hay que echar mano de conocimientos ingenieriles desempolvando la fórmula de Friis para la propagación, que es algo así:

Y ahí el término importante es la "d", que es la distancia de la antena radiante a la antena receptora. La potencia recibida disminuye con el cuadrado de la distancia. Eso quiere decir que si consideramos los 40W y nos separamos 20 metros, tendríamos que nos llegan 0,1W sin considerar que también hay que dividir por el cuadrado de 4*pi. Y sinceramente, no sé de ninguna antena que esté a menos de 20 metros de una vivienda en línea recta y sin paredes, ni obstáculos de ningún tipo de por medio. 
Pero vamos a compararlo con otras radiaciones que no nos dan miedo: la luz es una radiación EM y no tenemos problemas en usar bombillas de 100W, un teléfono móvil, que nos pegamos a la cabeza al hablar puede funcionar con picos de hasta 2 W aunque típicamente funcione con mucho menos. O el router inalámbrico de casa, que suele funcionar con unos 100mW y además emite a una frecuencia muy parecida a la de las antenas de telefonía móvil. Esos 100 mW, en general, van a ser mucho más relevantes que los de la antena de telefonía móvil, primero porque la señal del nodo B tendrá que atravesar paredes y obstáculos, por lo que la potencia que llega a casa será muy inferior y segundo porque el router probablemente lo tengamos a menos de 5 metros, sino a escasos centímetros. Ojo, esto no quiere decir que el router sea peligroso, ni mucho menos, pero no nos causa alarma porque vemos que tiene una antenita pequeña. Sí, aquí el tamaño parece que también nos importa y bastante. Y eso que las antenas en España radian muy por debajo de las recomendaciones de la UE.


Y si no pasa nada, ¿porque nos acojona tanto? Supongo que porque es cierto que es una tecnología tan reciente que no podemos afirmar categóricamente que no tengan efectos adversos en los humanos aunque no tengamos ni una sola prueba a favor. Pero a pesar de que, como ha quedado evidenciado, hay electrodomésticos que nos afectan más, esa radiación que no podemos ver nos asusta, quizá tenga mucho de culpa el accidente de la planta nuclear de Chernobyl, donde miles de personas murieron por culpa de una radiación que no podían ver, oler, tocar o sentir en forma alguna, pero que acabó matándolos. Claro que hay que tener en cuenta que esas son radiaciones ionizantes, es decir, aquellas que tienen energía suficiente como para modificar la estructura de los átomos. Por lo tanto no tienen nada que ver con la radiación no ionizante de la telefonía móvil y no se debería mezclar.

Chernobyl fue un ejemplo de que hay radiaciones que sí que nos deben preocupar, y de hecho tenemos un ejemplo mucho más "próximo" a pesar de estar a 150 millones de kilómetros y de creer que no nos puede hacer ningún mal: el Sol. Y no estoy hablando sólo del cáncer de piel que puede provocar una exposición prolongada sin protección, sino de las Eyecciones de Masa Coronales del Sol.


En el artículo de Quo al que enlazo se explica muy bien y con mucho detalle cómo funciona, pero a modo de resumen se puede decir que, periódicamente, aunque no de forma predecible, el Sol "escupe" gran cantidad de radiación que, bajo unas determinadas condiciones, puede provocar un colapso total de la Tierra: parar todas las comunicaciones satélite, desorientar aviones, reventar todos los transformadores inutilizando todas las estaciones eléctricas del mundo... Y no es algo tan inusual. Pasó en 1859, pero claro, el único sistema eléctrico que había era el telégrafo. De forma más localizada, ocurrió también en Quebec en 1989 con graves consecuencias: 6 millones de personas sin electricidad durante horas, satélites dando volteretas, daños de miles de millones de dólares...

En conclusión, hay radiaciones a las que les tenemos miedo sin saber por qué y otras a las que no les tenemos miedo aunque deberíamos... misterios de la raza humana.

Si queréis leer más mitos sobre radiaciones, este me ha llamado mucho la atención: el cactus que filtra las radiaciones "malas".

Más sobre campos EM en la Organización Mundial de la Salud.

jueves, 20 de septiembre de 2012

¿Algo de formación on-line certificada?

La semana que viene comenzaré en principio el curso de Inteligencia Artificial de la Universidad de Berkeley que comentaba por aquí. Pero como es tiempo de esfuerzo y de remar y todas esas cosas, me ha parecido poco, así que me he apuntado (para cuando este esté a medias) a otros dos cursos de la Universidad de Stanford que parecen muy interesantes. Al final seguramente me tendré que decantar sólo por uno de estos dos últimos, pero bueno, como son gratis y no puedo estar demasiado seguro de cuánto me van a gustar y cuánto tiempo me van a quitar (estos no indican estimación de tiempo), pues así les echo un ojo y ya vemos.


Los cursos concretos a los que me he apuntado son:
  • Finance. Acerca del mundo de las Finanzas, obviamente. Usando las matemáticas (está dirigido especialmente a estudiantes de ingeniería o ciencias) como herramienta pretende modelar y predecir el comportamiento de los mercados y las inversiones.
  • Technology Entrepreneurship. De este he encontrado los vídeos (no sé si todos) aquí. He visto el primer vídeo y el curso parece muy interesante, aunque no sé si será posible seguirlo de la mejor manera desde fuera de EEUU. Como su nombre indica trata del espíritu empresarial en empresas tecnológicas: cómo pasar de una idea relacionada con la tecnología a una oportunidad y de ahí a explotarla comercialmente (con éxito, claro).
Lo bueno de estos cursos de Stanford es que son colaborativos. Al contrario que los del MIT, en estos se promueve la formación de grupos para la consecución de los objetivos. En este caso tiene mucho sentido porque se trata de cursos orientados a tener una aplicación directa en el mundo real y a la creación de empresas, aunque no sé muy bien cómo funcionarán los equipos on-line, me parece un poco complicado.
Después de esta introducción, a lo que iba, que si alguien se anima a hacer alguno conmigo, que me dé el toque por si montamos una empresa High-Tech en el valle del Silicio ;)

martes, 4 de septiembre de 2012

El peligro de la falta de educación

Ayer comentaba en tono jocoso las presuntas virtudes de un "espiritualista" o mago o como carajo se quiera referir a sí mismo. Pero el caso es que este tipo de estafadores no tienen ninguna gracia. Son una pieza más para darle cabida a creencias irracionales, para que la gente las asuma como ciertas o como posibles o el típico "por si acaso, no me voy a arriesgar".
Pues bien, vamos a cocinar un cóctel peligroso:

  1. Falta de educación general, y científica, en particular.
  2. Ambientes marginales (opcional).
  3. Crisis (no hace falta que sea mundial, vale con que sea local).
  4. Una persona con un cierto carisma que le diga a la gente lo que quiere escuchar.
El resultado pueden ser varias cosas, pero ya adelanto que no va a salir nada bueno. Esto es lo que ha ocurrido en una población de Colombia:

No es una noticia de la Edad Media, ni de los juicios de Salem en la Nueva Inglaterra del siglo XVII, es de ayer, 3 de septiembre de 2012. Una mujer, en casa de la cual posteriormente se han encontrado solamente había un par láminas religiosas como las que puede haber en muchísimas casas de países con practicantes católicos o de cualquier otra religión, ha sido quemada por un grupo (posiblemente grande) de vecinos que, alentados por un "brujo" (manda pelotas), han decidido que era la causa de los males de las jóvenes del pueblo.
Y mientras, en el "primer mundo", seguimos recortando en educación y cada vez estamos más influenciados por lobbys que dicen que la evolución es sólo una teoría, que el ateísmo es una religión, que el VIH es un castigo divino a los homosexuales, que los adolescentes provocan a los religiosos...
Estamos en un periodo de crisis que se está eternizando y justamente por eso estamos en momentos peligrosos, en los que las posturas extremas pueden parecer cada vez más lógicas, así que debemos aferrarnos a las cosas que sabemos que funcionan, y la educación es algo que siempre funciona. 
Dejo una frase (creo que de Séneca) que me parece especialmente adecuada en estos momentos: "La suerte es el encuentro de la preparación con la oportunidad".

lunes, 3 de septiembre de 2012

Vuelta al cole y a la tontería

Cómo odiaba cuando era pequeño y a mediados de agosto comenzaba a ver anuncios de la vuelta al cole. Daban ganas de darle una patada a la tele y gritarle: "que todavía me quedan dos semanas, no me amargues!!!".
Pues bien, ya hemos vuelto, bueno, eso los que han podido. Porque a un amplio porcentaje de profesores interinos, lo que nos espera es una cita con el Servicio Autonómico de Empleo. [ironic mode ON] Suerte que con la subida del IVA al 21% y los recortes en prestaciones nos veremos incentivados para consumir más y para buscar empleo más activamente... [ironic mode OFF]
En fin, con tanto incentivo para buscar empleo o autoempleo, mira lo que se consigue:

No se puede negar que el tío es un hacha. Vale para un roto o un descosido. Para unir parejas o para separarlas si quieres, para levantar tu empresa o tu salchicha, con tal de que le pagues... No veo una mejor definición de prostitución sin sexo. Te hace lo que quieras y sin límites. Lo malo es que, especialmente en la época en que vivimos, muchísima gente cree en este tipo de tonterías, e incluso los que están en el límite de "no creo, pero por si acaso" caen en la tontería... Tío de la vara, ¿dónde estás cuando se te necesita?